POEMAS COMPARTIDOS
Tu
pañuelo’
Alguna
vez en tus brazos aprendí
Que
cuando se ama de verdad, no hay miedo
Hace ya
tiempo me acostumbré a estar sin ti
Por
favor, si lloro, no saques tu pañuelo.
Sí,
estando juntos todo era diferente
A tu
lado era indefensa, dulce y alegre
Cuando
te fuiste, no pude dejar de quererte
Te pido
por favor, aunque te ame, vete…
Me
acostumbré al silencio de tu ausencia
Y
aprendí a amar tu foto, a esperar con paciencia
Ahora
que has vuelto temo no poder
Dejar
de pensar a tu lado volver.
En tu
mirada siempre encontraba un despejado cielo
Después
de no verte, una tormenta encontré
Te
suplico, te lo imploro, no saques tu pañuelo
Porque
deberás irte y dejarte ir, lo dudaré.
¿Qué
pasará si te quedas otra vez?
¿Me
crees tan fácil de rendir a tus pies?
No saques
tu pañuelo, no lloraré
No me
ofrezcas tu hombro, no lo aceptaré.
No ha
pasado mucho y ya es demasiado
He
vivido poco y no te olvidaré…
No me
mires a los ojos, no leas mis labios…
No saques
tu pañuelo, si no, cederé.
“Cupido”
Dicen
que Cupido es una leyenda.
Llega,
señala y dispara, y luego vuela.
Muchas
veces no flecha a los dos,
por
eso y por más, se inventó el “adiós”
Dicen
que él escucha las tristezas,
poco
tiempo después acude en auxilio,
curando
al corazón de nuevo, con sus flechas,
aunque
después te vuelva a escuchar llorar
¡El
tonto de Cupido no sabe tolerar!,
extiende
sus alas, volviéndose a enfadar.
Vuela
y apunta, deteniéndose entonces,
escuchando
que esta vez, deseamos olvidar
“Mis días de secundaria”
Mis días de secundaria, felices fueron por ti
Ya que el último año, a tu lado lo viví
Mis días de secundaria jamás olvidaré,
llenos de romance los he de recordar
¡Todos los maestros nos querían separar!
Siempre me pillaban escribiendo cartas de amor,
nos veían perdidos en un mundo de dos,
importándonos poco el reglamento del salón
Mis días de secundaria tuvieron aventuras,
nuestra parada cada viernes: Mocambo,
escapar por un helado, ¡ése, ése helado!
Era vivir un sueño,
mi sueño…, de tu mano
Felices éramos escapando.
Gracias a ti supe qué era amar
Gracias por cada día, cada mañana,
por darme la ilusión de verte llegar
Recuerdo que el reglamento citaba:
“Aquí no se permiten
noviazgos”
Y nosotros como adolescentes,
no prestamos atención
Nunca olvidaré ese último año,
cuando tomados de la mano,
me entregaste tu amor.
Nunca olvidaré los besos con pasión
Desde tercero
de secundaria,
Tuya, enteramente, seré y soy,
Y te amaré como lo hice
aquellos días… en el mismo salón
No hay comentarios:
Publicar un comentario